Hechos 25:13-27 “Pasados algunos días, el rey Agripa y Berenice vinieron a Cesárea para saludar a Festo. Y como estuvieron allí muchos días, Festo expuso al rey la causa de Pablo, diciendo: Un hombre ha sido dejado preso por Félix, respecto al cual, cuando fui a Jerusalén, se me presentaron los principales sacerdotes y los ancianos de los judíos, pidiendo condenación contra él. A éstos respondí que no es costumbre de los romanos entregar alguno a la muerte antes que el acusado tenga delante a sus acusadores, y pueda defenderse de la acusación. Así que, habiendo venido ellos juntos acá, sin ninguna dilación, al día siguiente, sentado en el tribunal, mandé traer al hombre. Y estando presentes los acusadores, ningún cargo presentaron de los que yo sospechaba, sino que tenían contra él ciertas cuestiones acerca de su religión, y de un cierto Jesús, ya muerto, el que Pablo afirmaba estar vivo. Yo, dudando en cuestión semejante, le pregunté si quería ir a Jerusalén y allá ser juzgado de estas cosas. Mas como Pablo apeló para que se le reservase para el conocimiento de Augusto, mandé que le custodiasen hasta que le enviara yo a César. Entonces Agripa dijo a Festo: Yo también quisiera oír a ese hombre. Y él le dijo: Mañana le oirás. Al otro día, viniendo Agripa y Berenice con mucha pompa, y entrando en la audiencia con los tribunos y principales hombres de la ciudad, por mandato de Festo fue traído Pablo. Entonces Festo dijo: Rey Agripa, y todos los varones que estáis aquí juntos con nosotros, aquí tenéis a este hombre, respecto del cual toda la multitud de los judíos me ha demandado en Jerusalén y aquí, dando voces que no debe vivir más. Pero yo, hallando que ninguna cosa digna de muerte ha hecho, y como él mismo apeló a Augusto, he determinado enviarle a él. Como no tengo cosa cierta que escribir a mi señor, le he traído ante vosotros, y mayormente ante ti, oh rey Agripa, para que después de examinarle, tenga yo qué escribir. Porque me parece fuera de razón enviar un preso, y no informar de los cargos que haya en su contra.”
Vv. 13—27. Agripa tenía el gobierno de Galilea. ¡Cuántos juicios injustos y apresurados condenan la máxima romana!, versículo 16. Este pagano guiado sólo por la luz de la naturaleza, siguió exactamente la ley y las costumbres, pero ¡cuántos son los cristianos que no siguen las reglas de la verdad, la justicia y la caridad al juzgar a sus hermanos! Las cuestiones sobre la adoración de Dios, el camino de la salvación y las verdades del evangelio, pueden parecer dudosa y sin interés a los hombres mundanos y a los políticos. Véase con cuánta ligereza este romano habla de Cristo, y de la gran polémica entre judíos y cristianos. Pero se acerca el día en que Festo y todo el mundo verán que todos los intereses del imperio romano eran sólo fruslerías sin consecuencia comparados con esta cuestión de la resurrección de Cristo. Quienes tuvieron medios de instrucción y los despreciaron, serán Horrorosamente convencidos de su pecado y necedad. He aquí una noble asamblea reunida para oír las verdades del evangelio, aunque ellos sólo querían satisfacer su curiosidad asistiendo a la defensa de un prisionero. Aun ahora hay muchos que van a los lugares donde se oye la palabra de Dios con gran pompa‖ y demasiado a menudo sin mejor motivo que la curiosidad. Aunque ahora los ministros no son prisioneros que deban defender sus vidas, aun así, hay muchos que pretenden juzgarlos, deseosos de hacerlos ofensores por una palabra, antes que aprender de ellos la verdad y la voluntad de Dios para la salvación de sus almas. La pompa de esta comparecencia fue apagada por la gloria real del pobre prisionero en el estrado. ¡Qué era el honor del fino aspecto de ellos comparado con el de la sabiduría, y la gracia y la santidad de Pablo, su valor y su constancia para sufrir por Cristo! No es poca misericordia que Dios aclare como la luz nuestra justicia, y como el mediodía nuestro trato justo; sin que haya nada cierto cargado en nuestra contra. Dios hace que hasta los enemigos de su pueblo les hagan el bien.
Hechos 24:1-2 “Cinco días después, descendió el sumo sacerdote Ananías con algunos
de los ancianos y un cierto orador llamado Tértulo, y comparecieron ante el gobernador contra Pablo. Y cuando éste
fue llamado, Tértulo comenzó a acusarle, diciendo: Como debido a ti gozamos de gran paz, y muchas cosas son bien gobernadas en el pueblo por tu prudencia, “
Hechos 24:27” Pero al cabo de dos años recibió Félix por sucesor a Porcio Festo; y queriendo Félix congraciarse con los judíos, dejó preso a Pablo.”
Hechos 18.15” Pero si son cuestiones de palabras, y de nombres, y de vuestra ley, vedlo vosotros; porque yo no quiero ser juez de estas cosas.”
Hechos 26:30 “Cuando había dicho estas cosas, se levantó el rey, y el gobernador, y Berenice, y los que se habían sentado con ellos;”
Hechos 26:1-11 “Entonces Agripa dijo a Pablo: Se te permite hablar por ti mismo. Pablo entonces, extendiendo la mano, comenzó así su defensa: Me tengo por dichoso, oh rey Agripa, de que haya de defenderme hoy delante de ti de todas las cosas de que soy acusado por los judíos. Mayormente porque tú conoces todas las costumbres y cuestiones que hay entre los judíos; por lo cual te ruego que me oigas con paciencia. Mi vida, pues, desde mi juventud, la cual desde el principio pasé en mi nación, en Jerusalén, la conocen todos los judíos; los cuales también saben que yo desde el principio, si quieren testificarlo, conforme a la más rigurosa secta de nuestra religión, viví fariseo. Y ahora, por la esperanza de la promesa que hizo Dios a nuestros padres soy llamado a juicio; promesa cuyo cumplimiento esperan que han de alcanzar nuestras doce tribus, sirviendo constantemente a Dios de día y de noche. Por esta esperanza, oh rey Agripa, soy acusado por los judíos. ¡Qué! ¿Se juzga entre vosotros cosa increíble que Dios resucite a los muertos? Yo ciertamente había creído mi deber hacer muchas cosas contra el nombre de Jesús de Nazaret; lo cual también hice en Jerusalén. Yo encerré en cárceles a muchos de los santos, habiendo recibido poderes de los principales sacerdotes; y cuando los mataron, yo di mi voto. Y muchas veces, castigándolos en todas las sinagogas, los forcé a blasfemar; y enfurecido sobremanera contra ellos, los perseguí hasta en las ciudades extranjeras.
Vv. 1—11. El cristianismo nos enseña a dar razón de la esperanza que hay en nosotros y, también, a honrar a quien se debe rendir honores, sin halagos ni temor al hombre. Agripa era bien versado en las Escrituras del Antiguo Testamento, por tanto, podía juzgar mejor en la polémica de que Jesús es el Mesías. Ciertamente los ministros pueden esperar, cuando predican la fe de Cristo, que se les oiga con paciencia. Pablo confiesa que él aún adhería a todo lo bueno en que fue primeramente educado y preparado. Véase aquí cuál era su religión. Era un moralista, un hombre virtuoso, y no había aprendido las artes de los astutos fariseos codiciosos; a él no se podía acusar de ningún vicio franco ni de profano. Era firme en la fe. Siempre había tenido santa consideración por la antigua promesa hecha por Dios a los padres, y edificado su esperanza sobre ella. El apóstol sabía muy bien que todo eso no lo justificaba ante Dios, pero sabía que era para su reputación entre los judíos, y un argumento de que no era la clase de hombre que ellos decían que era. Aunque contaba esto como pérdida para ganar a Cristo, aun así, lo menciona cuando sirve para honrar a Cristo. Véase aquí cuál es la religión de Pablo; él no tiene el celo por la ley ceremonial que tuvo en su juventud; los sacrificios y las ofrendas designadas por ella, están terminadas por el gran Sacrificio que ellas tipificaban. No hace mención de los lavados ceremoniales y piensa que el sacerdocio levítico terminó por el sacerdocio de Cristo, pero en cuanto a los principales fundamentos de su religión, sigue tan celoso como siempre. Cristo y el cielo son las dos grandes doctrinas del evangelio; que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en su Hijo. Estos son el tema de la promesa hecha a los antepasados. El servicio del templo o el curso continuo de los deberes religiosos, día y noche, era mantenido como profesión de fe en la promesa de la vida eterna, y como expectativa de ella. La perspectiva de la vida eterna debe comprometernos a ser diligentes y constantes en todos los ejercicios religiosos. No obstante, los saduceos odiaban a Pablo por predicar la resurrección; y los otros judíos se unieron a ellos porque él testificaba que Jesús había resucitado y que era el prometido Redentor de Israel. Muchas cosas se piensan que están más allá de la creencia, sólo porque pasan por alto la naturaleza y las perfecciones infinitas de quien las reveló, cumplió o prometió. —Pablo reconoce que mientras fue fariseo, era un enemigo enconado del cristianismo. Este era su carácter y estilo de vida al comienzo de su tiempo; y había toda clase de cosas que obstaculizaban que él fuese cristiano. Quienes han sido más estrictos en su conducta antes de la conversión, después verán que hay muchos motivos para humillarse aún por cosas que entonces pensaban que debían hacerse.
Hechos 9:15 l Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel; “
Hechos 6.14” Y nosotros persistiremos en la oración y en el ministerio de la palabra”
Gálatas 1:13-14” Porque ya habéis oído acerca de mi conducta en otro tiempo en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios, y la asolaba; y en el judaísmo aventajaba a muchos de mis contemporáneos en mi nación, siendo mucho más celoso de las tradiciones de mis padres.
Filipenses 3:5 “circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo;”
Romanos 15:8 “Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.”
Tito 2:13 “3 aguardando la esperanza bienaventurada y la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo,”
Hechos 26:12-23 “12 Ocupado en esto, iba yo a Damasco con poderes y en comisión de los principales sacerdotes,13 cuando a mediodía, oh rey, yendo por el camino, vi una luz del cielo que sobrepasaba el resplandor del sol, la cual me rodeó a mí y a los que iban conmigo.14 Y habiendo caído todos nosotros en tierra, oí una voz que me hablaba, y decía en lengua hebrea: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Dura cosa te es dar coces contra el aguijón. 15 Yo entonces dije: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. 16 Pero levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que has visto, y de aquellas en que me apareceré a ti, 17 librándote de tu pueblo, y de los gentiles, a quienes ahora te envío, 18 para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados. 19 Por lo cual, oh rey Agripa, no fui rebelde a la visión celestial, 20 sino que anuncié primeramente a los que están en Damasco, y Jerusalén, y por toda la tierra de Judea, y a los gentiles, que se arrepintiesen y se convirtiesen a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento. 21 Por causa de esto los judíos, prendiéndome en el templo, intentaron matarme. 22 Pero habiendo obtenido auxilio de Dios, persevero hasta el día de hoy, dando testimonio a pequeños y a grandes, no diciendo nada fuera de las cosas que los profetas y Moisés dijeron que habían de suceder: 23 Que el Cristo había de padecer, y ser el primero de la resurrección de los muertos, para anunciar luz al pueblo y a los gentiles.
V-12—23. Pablo fue hecho cristiano por el poder divino; por una revelación de Cristo a él y en él, cuando estaba en el apogeo de su carrera de pecado. Fue hecho ministro por autoridad divina: el mismo Jesús que le apareció en esa luz gloriosa, le mandó predicar el evangelio a los gentiles. El mundo que está en tinieblas debe ser iluminado; deben ser llevados a conocer las cosas que corresponden a su paz eterna los que aún las ignoran. El mundo que yace en la iniquidad debe ser santificado y reformado; no basta con que a ellos se les haya abierto los ojos, ellos deben tener renovados sus corazones; no basta con ser vueltos desde la oscuridad a la luz; deben volverse del poder de Satanás a Dios. Todos los que son convertidos del pecado a Dios, no sólo son perdonados; tienen la concesión de una rica herencia. El perdón de pecados da lugar a esto. Nadie que no sea santo puede ser feliz; y para ser santos en el cielo debemos primero ser santos en la tierra. Somos hechos santos y salvados por fe en Cristo; por la cual confiamos en Cristo como Jehová Justicia nuestra, y nos entregamos a Él como Jehová nuestro Rey; por esto recibimos la remisión de pecados, el don del Espíritu Santo, y la vida eterna. La cruz de Cristo era una piedra de tropiezo para los judíos, y ellos estaban furiosos porque Pablo predicaba el cumplimiento de las predicciones del Antiguo Testamento. Cristo debe ser el primero que resucitara de entre los muertos; la Cabeza o el Principal. Además, los profetas anunciaron que los gentiles serían llevados a conocer a Dios por medio del Mesías; ¿y en qué podían desagradarse los judíos de esto, con justicia? Así, pues, el convertido verdadero puede dar razón de su esperanza y una buena cuenta del cambio manifiesto en él. Pero por andar por ahí y llamar a los hombres a arrepentirse y ser convertidos de esta manera, muchísimas personas han sido culpadas y perseguidas.
Hechos 9:7 “Y los hombres que iban con Saulo se pararon atónitos, oyendo a la verdad la voz, más sin ver a nadie.”
Hechos 21:40 “40 Y cuando él se lo permitió, Pablo, estando en pie en las gradas, hizo señal con la mano al pueblo. Y hecho gran silencio, habló en lengua hebrea, diciendo:”
Hechos 22:14-15” Y él dijo: El Dios de nuestros padres te ha escogido para que conozcas su voluntad, y veas al Justo, y oigas la voz de su boca. 15 Porque serás testigo suyo a todos los hombres, de lo que has visto y oído.”
Ezequiel 2:1-3” Me dijo: Hijo de hombre, ponte sobre tus pies, y hablaré contigo. 2 Y luego que me habló, entró el Espíritu en mí y me afirmó sobre mis pies, y oí al que me hablaba. 3 Y me dijo: Hijo de hombre, yo te envío a los hijos de Israel, a gentes rebeldes que se rebelaron contra mí; ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo día.
Daniel 10:11-12 “Y me dijo: Daniel, varón muy amado, está atento a las palabras que te hablaré, y ponte en pie; porque a ti he sido enviado ahora. Mientras hablaba esto conmigo, me puse en pie temblando. 12 Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido.
Jeremías 1:8-10” No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte, dice Jehová.9 Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras en tu boca. 10 Mira que te he puesto en este día sobre naciones y sobre reinos, para arrancar y para destruir, para arruinar y para derribar, para edificar y para plantar.
Jeremías 1:19” 19 Y pelearán contra ti, pero no te vencerán; porque yo estoy contigo, dice Jehová, para librarte.”
Hechos 26:24-32” 24 Diciendo él estas cosas en su defensa, Festo a gran voz dijo: Estás loco, Pablo; las muchas letras te vuelven loco. 25 Mas él dijo: No estoy loco, excelentísimo Festo, sino que hablo palabras de verdad y de cordura. 26 Pues el rey sabe estas cosas, delante de quien también hablo con toda confianza. Porque no pienso que ignora nada de esto; pues no se ha hecho esto en algún rincón. 27 ¿Crees, oh rey Agripa, a los profetas? Yo sé que crees. 28 Entonces Agripa dijo a Pablo: Por poco me persuades a ser cristiano. 29 Y Pablo dijo: !!¡Quisiera Dios que por poco o por mucho, no solamente tú, sino también todos los que hoy me oyen, fueseis hechos tales cual yo soy, excepto estas cadenas! 30 Cuando había dicho estas cosas, se levantó el rey, y el gobernador, y Berenice, y los que se habían sentado con ellos; 31 y cuando se retiraron aparte, hablaban entre sí, diciendo: Ninguna cosa digna ni de muerte ni de prisión ha hecho este hombre. 32 Y Agripa dijo a Festo: Podía este hombre ser puesto en libertad, si no hubiera apelado a César.
V. 24-32. Nos corresponde, en todas las ocasiones, decir palabras de verdad y sobriedad y, entonces, no tendremos que turbarnos por las censuras injustas de los hombres. Los seguidores activos y esforzados del evangelio han sido frecuentemente despreciados por soñadores o locos, por creer tales doctrinas y tales hechos maravillosos; y por atestiguar que la misma fe y diligencia, y una experiencia como la de ellos, es necesaria para todos los hombres, cualquiera sea su rango, para su salvación. Pero los apóstoles y los profetas, y el mismo Hijo de Dios, fueron expuestos a esta acusación; nadie tiene que conmoverse por eso cuando las gracias divinas los han hechos sabios para salvación. Agripa vio que había mucha razón para el cristianismo. Su entendimiento y su juicio fueron convencidos momentáneamente, pero su corazón no fue cambiado. Su conducta y temperamento eran muy diferentes de la humildad y espiritualidad del evangelio. Muchos de los que están casi persuadidos de ser religiosos, no están completamente persuadidos; están sometidos a fuertes convicciones de su deber y de la excelencia de los caminos de Dios, aunque no procuran sus convicciones. Pablo instaba que era interés de cada uno llegar a ser un cristiano verdadero: que hay gracia suficiente en Cristo para todos. Expresa su pleno convencimiento de la verdad del evangelio, la necesidad absoluta de fe en Cristo para salvación. La salvación de la esclavitud es lo que el evangelio de Cristo ofrece a los gentiles; a un mundo perdido. Sin embargo, es con mucha dificultad que se puede convencer a cualquier persona de que necesita la obra de gracia en su corazón, como necesaria para la conversión de los gentiles. Tengamos cuidado de la vacilación fatal de nuestra propia conducta; y acordémonos de cuánto dista el estar casi persuadido de ser cristiano, de serlo por completo como es todo creyente verdadero
1Corintios 1:22-25 “22 Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría;23 pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; 24 más para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios.25 Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres.”
Hechos 23:31-35 “ Y los soldados, tomando a Pablo como se les ordenó, le llevaron de noche a Antípatris. 32 Y al día siguiente, dejando a los jinetes que fuesen con él, volvieron a la fortaleza. 33 Cuando aquéllos llegaron a Cesárea, y dieron la carta al gobernador, presentaron también a Pablo delante de él. 34 Y el gobernador, leída la carta, preguntó de qué provincia era; y habiendo entendido que era de Cilicia,35 le dijo: Te oiré cuando vengan tus acusadores. Y mandó que le custodiasen en el pretorio de Herodes.”
Hechos 24:3-7 “3 oh excelentísimo Félix, lo recibimos en todo tiempo y en todo lugar con toda gratitud.4 Pero por no molestarte más largamente, te ruego que nos oigas brevemente conforme a tu equidad.
5 Porque hemos hallado que este hombre es una plaga, y promotor de sediciones entre todos los judíos por todo el mundo, y cabecilla de la secta de los nazarenos. 6 Intentó también profanar el templo; y prendiéndole, quisimos juzgarle conforme a nuestra ley. 7 Pero interviniendo el tribuno Lisias, con gran violencia le quitó de nuestras manos,”
Hechos 25:22-25 “Entonces Agripa dijo a Festo: Yo también quisiera oír a ese hombre. Y él le dijo: Mañana le oirás.23 Al otro día, viniendo Agripa y Berenice con mucha pompa, y entrando en la audiencia con los tribunos y principales hombres de la ciudad, por mandato de Festo fue traído Pablo. 24 Entonces Festo dijo: Rey Agripa, y todos los varones que estáis aquí juntos con nosotros, aquí tenéis a este hombre, respecto del cual toda la multitud de los judíos me ha demandado en Jerusalén y aquí, dando voces que no debe vivir más.25 Pero yo, hallando que ninguna cosa digna de muerte ha hecho, y como él mismo apeló a Augusto, he determinado enviarle a él.”
HECHOS: 27:1-11 “Cuando se decidió que habíamos de navegar para Italia, entregaron a Pablo y a algunos otros presos a un centurión llamado Julio, de la compañía Augusta. 2 Y embarcándonos en una nave adramitena que iba a tocar los puertos de Asia, zarpamos, estando con nosotros Aristarco, macedonio de Tesalónica. 3 Al otro día llegamos a Sidón; y Julio, tratando humanamente a Pablo, le permitió que fuese a los amigos, para ser atendido por ellos. 4 Y haciéndonos a la vela desde allí, navegamos a sotavento de Chipre, porque los vientos eran contrarios. 5 Habiendo atravesado el mar frente a Cilicia y Panfilia, arribamos a Mira, ciudad de Licia. 6 Y hallando allí el centurión una nave alejandrina que zarpaba para Italia, nos embarcó en ella. 7 Navegando muchos días despacio, y llegando a duras penas frente a Gnido, porque nos impedía el viento, navegamos a sotavento de Creta, frente a Salmón. 8 Y costeándola con dificultad, llegamos a un lugar que llaman Buenos Puertos, cerca del cual estaba la ciudad de Lasea. 9 Y habiendo pasado mucho tiempo, y siendo ya peligrosa la navegación, por haber pasado ya el ayuno, Pablo les amonestaba, 10 diciéndoles: Varones, veo que la navegación va a ser con perjuicio y mucha pérdida, no sólo del cargamento y de la nave, sino también de nuestras personas. 11 Pero el centurión daba más crédito al piloto y al patrón de la nave, que a lo que Pablo decía.”
V. 1—11. El consejo de Dios determinó, antes que lo determinara el consejo de Festo, que Pablo debía ir a Roma, porque Dios tenía allá obra para que él hiciera. Aquí se estipula el rumbo que siguieron y los lugares que tocaron. Con esto Dios estimula a los que sufren por Él a que confíen en Él; porque Él puede poner en los corazones de quienes menos se espera que se hagan sus amigos. Los marineros deben aprovechar al máximo el viento, y de igual modo, todos nosotros en nuestro paso por el océano de este mundo. Cuando los vientos son contrarios debemos seguir adelante tan bien como podamos. Muchos de los que no retroceden por las providencias negativas, no salen adelante por las providencias favorables. Muchos son los cristianos verdaderos que se lamentan de las preocupaciones de sus almas, que tienen mucho que hacer para mantenerse en su posición. Todo puerto bueno no es puerto seguro. Muchos de los que muestran respeto a los buenos ministros, no siguen sus consejos. Sin embargo, el suceso convencerá a los pecadores de la vanidad de sus esperanzas y de la necedad de su conducta.
Hechos 13:13-17 “Habiendo zarpado de Pafos, Pablo y sus compañeros arribaron a Perge de Panfilia; pero Juan, apartándose de ellos, volvió a Jerusalén.14 Ellos, pasando de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidia; y entraron en la sinagoga un día de reposo[a] y se sentaron. 15 Y después de la lectura de la ley y de los profetas, los principales de la sinagoga mandaron a decirles: Varones hermanos, si tenéis alguna palabra de exhortación para el pueblo, hablad. 16 Entonces Pablo, levantándose, hecha señal de silencio con la mano, dijo: Varones israelitas, y los que teméis a Dios, oíd: 17 El Dios de este pueblo de Israel escogió a nuestros padres, y enalteció al pueblo, siendo ellos extranjeros en tierra de Egipto, y con brazo levantado los sacó de ella.
Levítico 23:27-29 “ También habló Jehová a Moisés, diciendo:27 A los diez días de este mes séptimo será el día de expiación; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová.28 Ningún trabajo haréis en este día; porque es día de expiación, para reconciliaros delante de Jehová vuestro Dios.29 Porque toda persona que no se afligiere en este mismo día, será cortada de su pueblo.
Hechos 9:10-19 “Había entonces en Damasco un discípulo llamado Ananías, a quien el Señor dijo en visión: Ananías. Y él respondió: Heme aquí, Señor. 11 Y el Señor le dijo: Levántate, y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora, 12 y ha visto en visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima para que recobre la vista. 13 Entonces Ananías respondió: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén;14 y aun aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para prender a todos los que invocan tu nombre. 15 El Señor le dijo: Ve, porque instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles, y de reyes, y de los hijos de Israel; 16 porque yo le mostraré cuánto le es necesario padecer por mi nombre. 17 Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo. 18 Y al momento le cayeron de los ojos como escamas, y recibió al instante la vista; y levantándose, fue bautizado. 19 Y habiendo tomado alimento, recobró fuerzas. Y estuvo Saulo por algunos días con los discípulos que estaban en Damasco.”
Hechos 20:34-38 “Antes vosotros sabéis que para lo que me ha sido necesario a mí y a los que están conmigo, estas manos me han servido.
35 En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo: Más bienaventurado es dar que recibir.36 Cuando hubo dicho estas cosas, se puso de rodillas, y oró con todos ellos. 37 Entonces hubo gran llanto de todos; y echándose al cuello de Pablo, le besaban, 38 doliéndose en gran manera por la palabra que dijo, de que no verían más su rostro. Y le acompañaron al barco.
HECHOS: 27:12-20 “ Y siendo incómodo el puerto para invernar, la mayoría acordó zarpar también de allí, por si pudiesen arribar a Fenice, puerto de Creta que mira al nordeste y sudeste, e invernar allí. 13 Y soplando una brisa del sur, pareciéndoles que ya tenían lo que deseaban, levaron anclas e iban costeando Creta. 14 Pero no mucho después dio contra la nave un viento huracanado llamado Euroclidón. 15 Y siendo arrebatada la nave, y no pudiendo poner proa al viento, nos abandonamos a él y nos dejamos llevar. 16 Y habiendo corrido a sotavento de una pequeña isla llamada Clauda, con dificultad pudimos recoger el esquife. 17 Y una vez subido a bordo, usaron de refuerzos para ceñir la nave; y teniendo temor de dar en la Sirte, arriaron las velas y quedaron a la deriva. 18 Pero siendo combatidos por una furiosa tempestad, al siguiente día empezaron a alijar, 19 y al tercer día con nuestras propias manos arrojamos los aparejos de la nave. 20 Y no apareciendo ni sol ni estrellas por muchos días, y acosados por una tempestad no pequeña, ya habíamos perdido toda esperanza de salvarnos.
V12—20. Los que se lanzan al océano de este mundo, con un buen viento, no saben con qué tormentas pueden encontrarse, y, por tanto, no deben dar por sentado que hayan logrado su propósito. No nos hagamos la expectativa de estar completamente a salvo, sino hasta que entremos al cielo. Ellos no vieron sol ni estrellas por muchos días. Así, a veces, la tristeza es el estado del pueblo de Dios en cuanto a sus asuntos espirituales: andan en tinieblas y no tienen luz. Véase aquí qué es la riqueza del mundo: aunque codiciada como bendición, puede que llegue el momento en que sea una carga; no sólo demasiado pesada para llevarla a salvo, sino suficientemente pesada para hundir al que la tenga. Los hijos de este mundo pueden ser dispendiosos con los bienes para salvar su vida, pero son tacaños con sus bienes para las obras de piedad y caridad, y para sufrir por Cristo. Todo hombre preferiría hacer que zozobren sus bienes antes que su vida, pero muchos prefieren más bien que zozobre la fe y la buena conciencia antes que sus bienes. El medio que usaron los marineros no resultó, pero cuando los pecadores renuncian a toda esperanza de salvarse a sí mismos, están preparados para entender la palabra de Dios y para confiar en su misericordia por medio de Jesucristo.
Marcos 4:37 “ Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba.”
Hechos 27:1-6 “ Cuando se decidió que habíamos de navegar para Italia, entregaron a Pablo y a algunos otros presos a un centurión llamado Julio, de la compañía Augusta. 2 Y embarcándonos en una nave adramitena que iba a tocar los puertos de Asia, zarpamos, estando con nosotros Aristarco, macedonio de Tesalónica. 3 Al otro día llegamos a Sidón; y Julio, tratando humanamente a Pablo, le permitió que fuese a los amigos, para ser atendido por ellos. 4 Y haciéndonos a la vela desde allí, navegamos a sotavento de Chipre, porque los vientos eran contrarios. 5 Habiendo atravesado el mar frente a Cilicia y Panfilia, arribamos a Mira, ciudad de Licia. 6 Y hallando allí el centurión una nave alejandrina que zarpaba para Italia, nos embarcó en ella.”
Hechos 21:26-34 “Entonces Pablo tomó consigo a aquellos hombres, y al día siguiente, habiéndose purificado con ellos, entró en el templo, para anunciar el cumplimiento de los días de la purificación, cuando había de presentarse la ofrenda por cada uno de ellos.27 Pero cuando estaban para cumplirse los siete días, unos judíos de Asia, al verle en el templo, alborotaron a toda la multitud y le echaron mano,28 dando voces: !!¡Varones israelitas, ayudad! Este es el hombre que por todas partes enseña a todos contra el pueblo, la ley y este lugar; y además de esto, ha metido a griegos en el templo, y ha profanado este santo lugar.29 Porque antes habían visto con él en la ciudad a Trófimo, de Efeso, a quien pensaban que Pablo había metido en el templo.30 Así que toda la ciudad se conmovió, y se agolpó el pueblo; y apoderándose de Pablo, le arrastraron fuera del templo, e inmediatamente cerraron las puertas. 31 Y procurando ellos matarle, se le avisó al tribuno de la compañía, que toda la ciudad de Jerusalén estaba alborotada. 32 Este, tomando luego soldados y centuriones, corrió a ellos. Y cuando ellos vieron al tribuno y a los soldados, dejaron de golpear a Pablo. 33 Entonces, llegando el tribuno, le prendió y le mandó atar con dos cadenas, y preguntó quién era y qué había hecho. 34 Pero entre la multitud, unos gritaban una cosa, y otros otra; y como no podía entender nada de cierto a causa del alboroto, le mandó llevar a la fortaleza.”
HECHOS: 27:21-29 “21 Entonces Pablo, como hacía ya mucho que no comíamos, puesto en pie en medio de ellos, dijo: Habría sido por cierto conveniente, oh varones, haberme oído, y no zarpar de Creta tan sólo para recibir este perjuicio y pérdida.22 Pero ahora os exhorto a tener buen ánimo, pues no habrá ninguna pérdida de vida entre vosotros, sino solamente de la nave.23 Porque esta noche ha estado conmigo el ángel del Dios de quien soy y a quien sirvo,24 diciendo: Pablo, no temas; es necesario que comparezcas ante César; y he aquí, Dios te ha concedido todos los que navegan contigo.25 Por tanto, oh varones, tened buen ánimo; porque yo confío en Dios que será así como se me ha dicho.26 Con todo, es necesario que demos en alguna isla.27 Venida la décima cuarta noche, y siendo llevados a través del mar Adriático, a la medianoche los marineros sospecharon que estaban cerca de tierra;28 y echando la sonda, hallaron veinte brazas; y pasando un poco más adelante, volviendo a echar la sonda, hallaron quince brazas.29 Y temiendo dar en escollos, echaron cuatro anclas por la popa, y ansiaban que se hiciese de día.”
V. 21—29. Ellos no escucharon al apóstol cuando les advirtió del peligro; sin embargo, sí reconocen su necedad y se arrepienten de ella, él les habla consuelo y alivio en medio del peligro. La mayoría de la gente se mete en problemas porque no saben cuándo están bien; se dañan y se pierden por apuntar a la enmienda de su condición, a menudo en contra del consejo. Obsérvese la solemne confesión que hizo Pablo de su relación con Dios. Ninguna tormenta ni tempestad puede obstaculizar el favor de Dios hacia su pueblo dado que es ayuda siempre cercana. Es consuelo para los siervos fieles de Dios en dificultades que sus vidas serán prolongadas en la medida que el Señor tenga una obra para que ellos hagan. Si Pablo se hubiera comprometido innecesariamente en mala compañía, hubiera sido justamente lanzado con ellos, pero al llamarlo Dios, aquellos son preservados con él. Ellos te son dados; no hay mayor satisfacción para un hombre bueno que saber que es una bendición pública. Él los consuela con los consuelos con que él mismo fue consolado. Dios siempre es fiel, por tanto, estén siempre contentos todos los que dependen de sus promesas. Como decir y hacer no son dos cosas para Dios, tampoco creer y disfrutar deben serlo para nosotros. La esperanza es el ancla del alma, segura y firme, que entra hasta dentro del velo. Que los que están en tinieblas espirituales se sostengan firme de esto y no piensen en zarpar de nuevo, sino en permanecer en Cristo y esperar que alboree el día y las sombras huyan.
Romano 1:8-10 “Primeramente doy gracias a mi Dios mediante Jesucristo con respecto a todos vosotros, de que vuestra fe se divulga por todo el mundo. 9 Porque testigo me es Dios, a quien sirvo en mi espíritu en el evangelio de su Hijo, de que sin cesar hago mención de vosotros siempre en mis oraciones,10 rogando que de alguna manera tenga al fin, por la voluntad de Dios, un próspero viaje para ir a vosotros.
Hechos 23:10-12 “ Y habiendo grande disensión, el tribuno, teniendo temor de que Pablo fuese despedazado por ellos, mandó que bajasen soldados y le arrebatasen de en medio de ellos, y le llevasen a la fortaleza. 11 A la noche siguiente se le presentó el Señor y le dijo: Ten ánimo, Pablo, pues como has testificado de mí en Jerusalén, así es necesario que testifiques también en Roma. 12 Venido el día, algunos de los judíos tramaron un complot y se juramentaron bajo maldición, diciendo que no comerían ni beberían hasta que hubiesen dado muerte a Pablo.”
Romano 4:20-22 “ 20 Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, 21 plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido; 22 por lo cual también su fe le fue contada por justicia.”
Hechos 28:1 “Estando ya a salvo, supimos que la isla se llamaba Malta”
HECHOS: 27:30-38 “30 Entonces los marineros procuraron huir de la nave, y echando el esquife al mar, aparentaban como que querían largar las anclas de proa. 31 Pero Pablo dijo al centurión y a los soldados: Si éstos no permanecen en la nave, vosotros no podéis salvaros.32 Entonces los soldados cortaron las amarras del esquife y lo dejaron perderse.33 Cuando comenzó a amanecer, Pablo exhortaba a todos que comiesen, diciendo: Este es el decimocuarto día que veláis y permanecéis en ayunas, sin comer nada.34 Por tanto, os ruego que comáis por vuestra salud; pues ni aun un cabello de la cabeza de ninguno de vosotros perecerá.35 Y habiendo dicho esto, tomó el pan y dio gracias a Dios en presencia de todos, y partiéndolo, comenzó a comer.36 Entonces todos, teniendo ya mejor ánimo, comieron también.37 Y éramos todas las personas en la nave doscientas setenta y seis.38 Y ya satisfechos, aligeraron la nave, echando el trigo al mar.”
V30-38. Dios que determinó el fin, que ellos sean salvados, determinó el medio, que fueran salvados por la ayuda de estos marineros. El deber es nuestro, los sucesos son de Dios; no confiamos en Dios, pero le tentamos cuando decimos que nos ponemos bajo su protección, si no usamos los medios apropiados para nuestra seguridad, como los que están a nuestro alcance. ¡Pero cuán egoístas son en general los hombres que, a menudo están listos para procurar su propia seguridad por la destrucción del prójimo! Dichosos quienes tienen en su compañía a uno como Pablo, que no sólo tiene relación con el Cielo, sino que era espíritu vivificante para quienes le rodeaban. La tristeza según el mundo produce muerte, mientras el gozo en Dios es vida y paz, en las angustias y peligros más grandes. El consuelo de las promesas de Dios puede ser nuestro sólo si dependemos con fe de Él para que cumpla su palabra en nosotros; la salvación que Él revela hay que esperarla en el uso de los medios que Él determina. Si Dios nos ha escogido para salvación, también ha determinado que la obtengamos por el arrepentimiento, la fe, la oración y la obediencia perseverante; presunción fatal es esperarla en alguna otra manera. Estímulo para la gente es encomendarse a Cristo como su Salvador cuando quienes invitan, muestran claramente que así lo hacen ellos mismos.
Mateo 10:30 “ Pues aun vuestros cabellos están todos contados.”
Lucas 12:27 “ Considerad los lirios, cómo crecen; no trabajan, ni hilan; mas os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió como uno de ellos.”
1Samuel 9:13 “ Cuando entréis en la ciudad, le encontraréis luego, antes que suba al lugar alto a comer; pues el pueblo no comerá hasta que él haya llegado, por cuanto él es el que bendice el sacrificio; después de esto comen los convidados. Subid, pues, ahora, porque ahora le hallaréis.”
Mateo 15:32-38 “32 Y Jesús, llamando a sus discípulos, dijo: Tengo compasión de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; y enviarlos en ayunas no quiero, no sea que desmayen en el camino. 33 Entonces sus discípulos le dijeron: ¿De dónde tenemos nosotros tantos panes en el desierto, para saciar a una multitud tan grande? 34 Jesús les dijo: ¿Cuántos panes tenéis? Y ellos dijeron: Siete, y unos pocos pececillos. 35 Y mandó a la multitud que se recostase en tierra.36 Y tomando los siete panes y los peces, dio gracias, los partió y dio a sus discípulos, y los discípulos a la multitud.37 Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, siete canastas llenas. 38 Y eran los que habían comido, cuatro mil hombres, sin contar las mujeres y los niños.”
MALTA: Es una isla ubicada en una posición estratégicamente importante a unos 100 km. al sur de Sicilia. Roma adquirió la isla en 218 a. de J.C., pero el idioma cartageno se siguió utilizando, lo que explica la frase de Lucas: los nativos Hechos 28:2, naturales en RVR-1960), una palabra que daba a entender el sentido gr. de uno que habla un idioma extranjero. Malta fue la escena donde Pablo sufrió naufragio Hechos 27:27 .
HECHOS: 27:39-44 “39 Cuando se hizo de día, no reconocían la tierra, pero veían una ensenada que tenía playa, en la cual acordaron varar, si pudiesen, la nave. 40 Cortando, pues, las anclas, las dejaron en el mar, largando también las amarras del timón; e izada al viento la vela de proa, enfilaron hacia la playa.41 Pero dando en un lugar de dos aguas, hicieron encallar la nave; y la proa, hincada, quedó inmóvil, y la popa se abría con la violencia del mar.42 Entonces los soldados acordaron matar a los presos, para que ninguno se fugase nadando.43 Pero el centurión, queriendo salvar a Pablo, les impidió este intento, y mandó que los que pudiesen nadar se echasen los primeros, y saliesen a tierra;44 y los demás, parte en tablas, parte en cosas de la nave. Y así aconteció que todos se salvaron saliendo a tierra.”
V.39-44. El barco que había capeado la tormenta en el mar abierto, donde había espacio, se rompe en pedazos cuando está amarrado. Así, está perdido el corazón que fija en el mundo sus afectos, y se aferra a éste. Las tentaciones de Satanás lo golpean y se acaba, pero hay esperanza en tanto se mantenga por encima del mundo, aunque zarandeado con afanes y tumultos. Ellos tenían la costa a la vista, pero zozobraron en el puerto; así se nos enseña que nunca nos sintamos seguros. Aunque hay grandes dificultades en el camino de la salvación prometida, se producirá sin falta. Sucederá no importa cuántas sean las pruebas y peligros, porque en el debido momento todos los creyentes llegarán a salvo al cielo. Señor Jesús, tú nos aseguraste que ninguno de los tuyos perecerá. Tú los llevarás a todos a salvo a la playa celestial. ¡Y cuán placentero será ese desembarco! Tú los presentarás a tu Padre, y darás a tu Espíritu Santo la plena posesión de ellos para siempre.
Hechos 28:1” Estando ya a salvo, supimos que la isla se llamaba Malta”
2Corintios 11:24-28 “24 De los judíos cinco veces he recibido cuarenta azotes menos uno. 25 Tres veces he sido azotado con varas; una vez apedreado; tres veces he padecido naufragio; una noche y un día he estado como náufrago en alta mar;26 en caminos muchas veces; en peligros de ríos, peligros de ladrones, peligros de los de mi nación, peligros de los gentiles, peligros en la ciudad, peligros en el desierto, peligros en el mar, peligros entre falsos hermanos; 27 en trabajo y fatiga, en muchos desvelos, en hambre y sed, en muchos ayunos, en frío y en desnudez; 28 y además de otras cosas, lo que sobre mí se agolpa cada día, la preocupación por todas las iglesias.
Hechos 28:1-10 “Estando ya a salvo, supimos que la isla se llamaba Malta. 2 Y los naturales nos trataron con no poca humanidad; porque encendiendo un fuego, nos recibieron a todos, a causa de la lluvia que caía, y del frío. 3 Entonces, habiendo recogido Pablo algunas ramas secas, las echó al fuego; y una víbora, huyendo del calor, se le prendió en la mano.4 Cuando los naturales vieron la víbora colgando de su mano, se decían unos a otros: Ciertamente este hombre es homicida, a quien, escapado del mar, la justicia no deja vivir.5 Pero él, sacudiendo la víbora en el fuego, ningún daño padeció.6 Ellos estaban esperando que él se hinchase, o cayese muerto de repente; mas habiendo esperado mucho, y viendo que ningún mal le venía, cambiaron de parecer y dijeron que era un dios. 7 En aquellos lugares había propiedades del hombre principal de la isla, llamado Publio, quien nos recibió y hospedó solícitamente tres días.8 Y aconteció que el padre de Publio estaba en cama, enfermo de fiebre y de disentería; y entró Pablo a verle, y después de haber orado, le impuso las manos, y le sanó.9 Hecho esto, también los otros que en la isla tenían enfermedades, venían, y eran sanados;10 los cuales también nos honraron con muchas atenciones; y cuando zarpamos, nos cargaron de las cosas necesarias.
V. 1-10. Dios puede hacer que los extraños sean amigos; amigos en la angustia. Quienes son despreciados por sus maneras acogedoras suelen ser más amistosos que los más educados; y la conducta de los paganos, o de las personas calificadas de bárbaros, condena a muchos en las naciones civilizadas, que profesan ser cristianas. La gente pensó que Pablo era un asesino, y que la víbora fue enviada por la justicia divina para que fuera la vengadora de la sangre. Sabían que hay un Dios que gobierna el mundo, de modo que las cosas no acontecen por casualidad, no, ni el suceso más mínimo, sino que todo es por dirección divina; y que el mal persigue a los pecadores; que hay buenas obras que Dios recompensará, y malas obras que castigará. Además, que el asesinato es un delito horrible y que no pasará mucho tiempo sin que sea castigado. Pero pensaban que todos los malos eran castigados en esta vida. Aunque algunos son hechos ejemplos en este mundo para probar que hay un Dios y una providencia, aún muchos son dejados sin castigar para probar que hay un juicio venidero. También pensaban que era gente mala todos los que eran notablemente afligidos en esta vida. La revelación divina pone este asunto bajo la luz verdadera. Los hombres buenos suelen ser sumamente afligidos en esta vida para la prueba y el aumento de su fe y paciencia. Fijaos en la liberación de Pablo ante el peligro. Y, así, en el poder de la gracia de Cristo, los creyentes se sacuden las tentaciones de Satanás con santa resolución. Cuando despreciamos las censuras y los reproches de los hombres, y los miramos con santo desprecio, teniendo el testimonio de nuestras conciencias, entonces, como Pablo, sacudimos a la víbora tirándola al fuego. No nos hace daño excepto si por ello nos mantenemos fuera de nuestro deber. Con eso Dios hace notable a Pablo para esa gente y, de ese modo, abrió el camino para la recepción del evangelio. El Señor levanta amigos para su pueblo en todo lugar donde los lleve, y los hace bendición para los afligidos.
Romano 1:12-15 “ Esto es, para ser mutuamente confortados por la fe que nos es común a vosotros y a mí. 13 Pero no quiero, hermanos, que ignoréis que muchas veces me he propuesto ir a vosotros (pero hasta ahora he sido estorbado), para tener también entre vosotros algún fruto, como entre los demás gentiles.14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor. 15 Así que, en cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis en Roma.
1Corintio 14:11 “10 Tantas clases de idiomas hay, seguramente, en el mundo, y ninguno de ellos carece de significado.11 Pero si yo ignoro el valor de las palabras, seré como extranjero para el que habla, y el que habla será como extranjero para mí.12 Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia.13 Por lo cual, el que habla en lengua extraña, pida en oración poder interpretarla.”
Hechos 28:11-16 “11 Pasados tres meses, nos hicimos a la vela en una nave alejandrina que había invernado en la isla, la cual tenía por enseña a Cástor y Pólux. 12 Y llegados a Siracusa, estuvimos allí tres días. 13 De allí, costeando alrededor, llegamos a Regio; y otro día después, soplando el viento sur, llegamos al segundo día a Puteoli, 14 donde habiendo hallado hermanos, nos rogaron que nos quedásemos con ellos siete días; y luego fuimos a Roma, 15 de donde, oyendo de nosotros los hermanos, salieron a recibirnos hasta el Foro de Apio y las Tres Tabernas; y al verlos, Pablo dio gracias a Dios y cobró aliento. 16 Cuando llegamos a Roma, el centurión entregó los presos al prefecto militar, pero a Pablo se le permitió vivir aparte, con un soldado que le custodiase.
V.11-16. Los acontecimientos corrientes de los viajes raramente son dignos de ser narrados, pero merece mención particular el consuelo de la comunión con los santos, y la bondad mostrada por los amigos. Los cristianos de Roma estaban tan lejos de avergonzarse por Pablo, o de tener miedo de reconocerlo porque él era un prisionero, que tuvieron más cuidado en mostrarle respeto. Tuvo mucho consuelo con esto. Y, si nuestros amigos son buenos con nosotros, Dios lo ha puesto en sus corazones y debemos dar a Él la gloria. Cuando vemos, aún en el extranjero, a los que llevan el nombre de Cristo, temen a Dios y le sirven, debemos elevar nuestros corazones al cielo en acción de gracias. ¡Cuántos hombres grandes han hecho su entrada en Roma, coronados y llevados en triunfo, siendo realmente plagas para el mundo! Pero he aquí a un hombre bueno que hace su entrada en Roma encadenado como pobre cautivo, siendo para el mundo una bendición más grande que cualquier otro humano. ¿No basta esto para dejar de pavonearnos por el favor mundano? —Esto puede animar a los prisioneros de Dios, porque Él puede darles favor ante los ojos de los que los llevan presos. Cuando Dios no libra pronto a su pueblo de la esclavitud, de todos modos, se las hace ligera o los calma mientras están sometidos a ella, y tienen razón para estar agradecidos.
Hechos 27:6 “Habiendo atravesado el mar frente a Cilicia y Panfilia, arribamos a Mira, ciudad de Licia. 6 Y hallando allí el centurión una nave alejandrina que zarpaba para Italia, nos embarcó en ella.”
Hechos 1:15-16 “ En aquellos días Pedro se levantó en medio de los hermanos( y los reunidos eran como ciento veinte en número), y dijo: Varones hermanos, era necesario que se cumpliese la Escritura en que el Espíritu Santo habló antes por boca de David acerca de Judas, que fue guía de los que prendieron a Jesús.”
Hechos 24:23 “ Y mandó al centurión que se custodiase a Pablo, pero que se le concediese alguna libertad, y que no impidiese a ninguno de los suyos servirle o venir a él.”
Hechos 28:17-22 “17 Aconteció que tres días después, Pablo convocó a los principales de los judíos, a los cuales, luego que estuvieron reunidos, les dijo: Yo, varones hermanos, no habiendo hecho nada contra el pueblo, ni contra las costumbres de nuestros padres, he sido entregado preso desde Jerusalén en manos de los romanos; 18 los cuales, habiéndome examinado, me querían soltar, por no haber en mí ninguna causa de muerte. 19 Pero oponiéndose los judíos, me vi obligado a apelar a César; no porque tenga de qué acusar a mi nación. 20 Así que por esta causa os he llamado para veros y hablaros; porque por la esperanza de Israel estoy sujeto con esta cadena.21 Entonces ellos le dijeron: Nosotros ni hemos recibido de Judea cartas acerca de ti, ni ha venido alguno de los hermanos que haya denunciado o hablado algún mal de ti.22 Pero querríamos oír de ti lo que piensas; porque de esta secta nos es notorio que en todas partes se habla contra ella.
Vv. 17—22. Fue para honra de Pablo que los que examinaron su caso, lo exoneraran. En su apelación no procuró acusar a su nación, sino sólo aclarar su condición. —El cristianismo verdadero establece lo que es de interés común para toda la humanidad, y no se edifica sobre las opiniones estrechas ni sobre intereses privados. No apunta a ningún beneficio o ventaja mundana, pero todas sus ganancias son espirituales y eternas. La suerte de la santa religión de Cristo es, y siempre ha sido, que hablen en contra de ella. Obsérvese en toda ciudad y pueblo donde se enaltezca a Cristo como el único Salvador de la humanidad, y donde la gente es llamada a seguirlo a la vida nueva, y nótese que aún son tratados de secta, de partido, y se reprocha a los que se entregan a Cristo. Y este es el trato que recibirán con seguridad, mientras haya un hombre impío sobre la tierra.
Hechos 13:50” Pero los judíos instigaron a mujeres piadosas y distinguidas, y a los principales de la ciudad, y levantaron persecución contra Pablo y Bernabé, y los expulsaron de los límites”
Hechos 25:11 “Porque si algún agravio, o cosa alguna digna de muerte he hecho, no rehusó morir; pero si nada hay de las cosas de que éstos me acusan, nadie puede entregarme a ellos. A César apelo. “
Hechos 26.6 “ Y ahora por la esperanza de la promesa que hizo Dios a nuestros padres soy llamado a juicio;”
Efesio 3:1 “ Por esta causa yo Pablo, prisionero de Cristo Jesús por vosotros los gentiles;”
2Timoteo 1:6 “ Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.”
Hechos 28:23-31 “23 Y
habiéndole señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los cuales les declaraba y les testificaba el reino de Dios desde la mañana hasta la tarde, persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto
por la ley de Moisés como por los profetas. 24 Y
algunos asentían a lo que se decía, pero otros no creían. 25 Y
como no estuviesen de acuerdo entre sí, al retirarse, les dijo Pablo esta palabra: Bien habló el Espíritu Santo por medio del profeta Isaías a nuestros padres, diciendo:
26 Ve
a este pueblo, y diles: De oído oiréis, y no entenderéis;
Y viendo veréis, y no percibiréis; 27 Porque
el corazón de este pueblo se ha engrosado, Y con los oídos oyeron pesadamente,
Y sus ojos han cerrado, Para que no vean con los ojos,
Y oigan con los oídos, Y entiendan de corazón,
Y se conviertan, Y yo los sane. 28 Sabed,
pues, que a los gentiles es enviada esta salvación de Dios; y ellos oirán. 29 Y
cuando hubo dicho esto, los judíos se fueron, teniendo gran discusión entre sí.
30 Y Pablo permaneció dos años enteros en una casa alquilada, y recibía a todos los que a él venían, 31 predicando el reino de Dios y enseñando acerca del Señor Jesucristo, abiertamente y sin impedimento.”
V-23-31. Pablo persuadió a los judíos acerca de Jesús. Algunos fueron trabajados por la palabra y otros, endurecidos; algunos recibieron la luz, y otros cerraron sus ojos contra ella. Este ha sido siempre el efecto del evangelio. Pablo se separó de ellos observando que el Espíritu Santo había descrito bien el estado de ellos. Todos los que oyen el evangelio, sin obedecerlo, tiemblen ante su sino, porque, ¿quién los sanará si Dios no? Los judíos razonaron mucho entre ellos, después. Muchos de los que tienen un gran razonamiento no razonan correctamente. Hallan defectuosas las opiniones de unos y otros, pero no se rinden a la verdad. Ni tampoco los convencerá el razonamiento de los hombres, si la gracia de Dios no les abre el entendimiento. Mientras nos dolemos por los desdeñosos, debemos regocijarnos que la salvación de Dios sea enviada a otros que la recibirán; si somos de ese grupo, debemos estar agradecidos de Aquel que nos ha hecho diferir. El apóstol se adhirió a su principio de no conocer ni predicar otra cosa sino a Cristo, y éste crucificado. Cuando los cristianos son tentados por su ocupación principal, deben retrotraerse con esta pregunta, ¿qué tiene que ver esto con el Señor Jesús? ¿Qué tendencia hay en eso que nos lleve a Él y nos mantenga caminando en Él? El apóstol no se predicaba a sí mismo, sino a Cristo y no se avergonzaba del evangelio de Cristo. Aunque a Pablo lo pusieron en una condición muy estrecha para ser útil, no se sintió perturbado por ella. Aunque no era una puerta ancha la que se le abrió a él, sin embargo, no toleró que nadie la cerrara; y para muchos era una puerta eficaz, de modo que hubo santos hasta en la casa de Nerón, También de Filipenses 1, 13, aprendemos cómo Dios pasa por alto la prisión de Pablo para el avance del evangelio. Y no sólo los residentes de Roma, sino toda la iglesia de Cristo, hasta el día presente, y en el rincón más remoto del planeta, tienen mucha razón para bendecir a Dios porque él fuera detenido como prisionero durante el período más maduro de su vida cristiana. Fue desde su prisión, probablemente encadenado mano a mano con el soldado que lo custodiaba, que el apóstol escribió las epístolas a los Efesios, Filipenses, Colosenses, y hebreos; estas epístolas muestran, quizá más que cualesquiera otras, el amor cristiano con que rebosaba su corazón, y la experiencia cristiana con que estaba llena su alma. El creyente de la época actual puede tener menos triunfo y menos gozo celestial que el apóstol, pero todo seguidor del mismo Salvador está igualmente seguro de estar a salvo y en paz al final. Procuremos vivir más y más en el amor del Salvador; trabajar para glorificarle con toda acción de nuestra vida; y con toda seguridad por su poder, estaremos entre los que ahora vencen a sus enemigos; y por su gracia gratuita y misericordia, en el más allá estaremos en la compañía bendita que se sentará con Él en su trono, así como Él venció y está sentado en el trono de su Padre, a la diestra de Dios para siempre jamás.
Filipense 1:13 “ De tal manera que mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás”
Hechos 7:3 “ Y le dijo: Varones hermanos y padres, oíd: el Dios de la gloria apareció a nuestro Padre Abraham, estando en Mesopotamia, antes que morase en Harán.”
Hechos 14:4 “ Y la gente de la ciudad estaba dividida; unos estaban con los judíos y otros con los apóstoles.”
Isaías 6:9-10 “ Y dijo: anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis. Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, ni oigan con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad “
Mateo 13:14-15 “ De manera que se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dijo: De oído oiréis, y no entenderéis Y viendo veréis , y no percibiréis . Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, y con los oídos oyen pesadamente y han cerrado sus ojos; Para que no vean con los ojos. Y oigan con los oídos, y con el corazón entiendan y se conviertan y Yo los sane.”
Romano 11:8 “Como está escrito: Dios les dio espíritu de estupor, ojos conque no vean y oídos conque no oigan, hasta el día de hoy “
Romano 11:11 “ Digo, pues; ¿Han tropezado los de Israel para que cayesen? En ninguna manera; pero por su transgresión vino la salvación a los gentiles, para provocarles a celos”
ENSEÑANZA: En los Hechos encontramos un recuento histórico de las primeras conversiones a Jesucristo. A aquí aparece en detalle el mensaje de los Apóstoles y la respuesta de la gente. También se halla la promesa sobre la dádiva del Espíritu Santo a todo aquel que crea. Una experiencia de poder que fue normativa en la Iglesia Primitiva. Nuestro mensaje hoy debe ser este mismo, en lo que respecta a la dádiva del Espíritu Santo y la vida que de Él brota.
En el Antiguo Testamento sólo recibieron el Espíritu Santo aquellos que eran objeto de un llamado especial de Dios o ungidos por el Señor. Pero bajo el nuevo pacto a todos los creyentes se les ofrece la promesa del Padre (Lucas 24,49), la activa presencia del Espíritu Santo. Es debido a la plenitud del Espíritu y a su actividad en la vida de cada creyente que prosigue el ministerio de Cristo y su Iglesia.
Los Hechos contiene material indispensable para quienes quieren conocer los poderosos principios del Liderazgo cristiano. Este liderazgo en los Hechos es uno de los más extraordinarios ejemplos de fuerza espiritual que la Iglesia ha conocido a través de la historia. Cada vez que los Líderes cristianos han olvidado los modelos que aparecen en los Hechos, han perdido gran parte de su poder. Aplicar las lecciones para Lideres que ofrece los Hechos ayudara a proporcionarles a los dirigentes cristianos de hoy un ministerio de poder y eficacia crecientes.
El Libro de los Hechos nos llama a una fe enérgica, que puede no resultar familiar para muchas personas. Es refrescante leer acerca de hombres y mujeres que creyeron en nuestro Dios, para hacer grandes cosas, de una forma extraordinaria. Debemos tener el coraje de imitarlos. Estos relatos nos invitan a enfrentar los riesgos asociados a esta Fe Valiente.
DECISION A TOMAR:
Arrepiéntete, sé bautizado y recibe la dadiva del Espíritu Santo. Sé Salvo
Recibe el perdón y el olvido de tus pecados por medio de la conversión. Disfruta la refrescante Presencia de Dios.
Conoce que sólo el Nombre de Jesucristo trae salvación
Asegúrate de que todo aquel que conduzcas a Jesús reciba el bautismo en aguas.
Recuerda que el bautismo en aguas fue parte integral de la predicación apostólica.
Reconoce que el acto del bautismo en aguas representa el cambio de la culpa y la conciencia del pecado, por el reconocimiento de la limpieza del pecado, gracias a la muerte de Cristo y una nueva conciencia de la Presencia de Dios.
Cree que el poder de Dios viene sólo a través del Espíritu Santo. No intentes ejercer el ministerio sin el Espíritu Santo.
Busca y Recibe el bautismo del Espíritu Santo Sé lleno del Espíritu Santo Sé lleno del Espíritu para renovar constantemente tu vida y ministerio.
Ejercita la forma en que oras como parte del fluir del Espíritu Santo en tu vida.
Busca que tu relación con Jesús, llena del Espíritu, te ayude hablar enérgicamente, con valentía y comprensión espiritual.
Lleva el mensaje de Jesús con audacia, pídele al Espíritu Santo que confirme tu testimonio.
Orar es hablar con Dios y decirle lo que sientes, Él conoce lo que hay en tú corazón y por lo que estás pasando, antes de tú abrir tu boca Él ya sabe todo, pero es importante confesarlo delante de Él.
ORACION DE SALVACION
“Amado Dios, acepto a Cristo, ahora mismo como único y exclusivo Salvador de mi alma. Te acepto Jesús, públicamente; no me avergüenzo de ti; perdona mis pecados. Entra a mi corazón. Cambia mi vida. Lávame en tu sangre, y ayúdame a que persevere, firme en tu camino, firme en la Iglesia. Que sea bautizado y que sea lleno del Espíritu Santo. Escribe mi nombre en el Libro de la Vida. Te amo, Jesús. Gracias Jesús, creo en ti y soy salvo ahora. Tu sangre limpió mis pecados. Amen.
Mi correo es: elisacardona59@Hotmail.com