HECHOS DE LOS APÓSTOLES 5

22. Varones Israelitas, oíd estas palabras: Jesús Nazareno, varón aprobado por Dios entre vosotros con las maravillas, prodigios y señales que Dios hizo entre vosotros por medio de él como vosotros mismo sabéis.

Maravillas, prodigios y señales, Rasgos del Líder, Sin excepción acompañaron el ministerio y la predicación de los primeros líderes de la iglesia.  Aquí Pedro le recordó al pueblo que la credibilidad de Jesús estaba basada en su ministerio de milagros. Esta misma credibilidad acompaño a aquellos que fueron apartados para el liderazgo, tales como Esteban, Felipe, Bernabé, Silas y Pablo, y también a los primeros Apóstoles. También los dirigentes de la primera iglesia oraron por milagros, y los vieron, no como hechos casuales o sucesos ocasionales, si no como evidencias de la unción de Dios en las que continuamente se glorificaba a Cristo a través de la iglesia, y que por consiguiente, debían buscarse y ser bien recibidas.  

 Marcos 5:39-42 “Y entrando les dijo: ¿Por qué alborotáis  y lloráis? La niña no está muerta, si no duerme. Y se burlaban de él. Mas él, echando fuera a todos, tomó al padre y a la madre de la niña, y a los que estaban con él, y entro donde estaba la niña. Y tomando la mano de la niña, le dijo. Talita cumi; que traducido es niña, a ti te digo, levántate. Y luego la niña se levantó y andaba, pues tenía doce años. Y se espantaron grandemente.”

Juan 3:2 “Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces si no está Dios con él.  

Juan 9:16-17 “Entonces algunos de los fariseos decían: Ese hombre no posee de Dios, porque no guarda el día de reposo. Otros decían: ¿Cómo puede un hombre pecador hacer estas señales? Y había descensión entre ellos.     Entonces volvieron a decirle al ciego: ¿Qué dices tú del que te abrió los ojos? Y él dijo: Que es profeta.  

Mateo 21: 11 “Y la gente decía: Este es Jesús el profeta, de Nazaret de Galilea.”

Juan 4: 46-50  “Vino, pues, Jesús otra vez a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Y había en Capernaum un oficial del rey. Cuyo hijo estaba enfermo. Este cuando oyó que Jesús había llegado de Judea a Galilea, vino a él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, que estaba a punto de morir. Entonces Jesús le dijo: Si no viereis señales y prodigios no creerías. El oficial del rey le dijo: Señor, desciende antes que mi hijo muera. Jesús le dijo: Vé, tu hijo vive. Y el hombre creyó la palabra que Jesús le dijo, y se fue.”         

Juan 11: 32-33 “María, cuando llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor, si hubieses estado aquí, no habría muerto mi hermano. Jesús entonces al verla llorando, y a los judíos que le acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió.”

Juan 11:38-45 “Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra            puesta encima. Dijo Jesús: quitad piedra. Marta, la hermana          del que había muerto le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días. Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?        Entonces quitaron la piedra de donde había  sido puesto el muerto. Y Jesús alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído. Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú me has enviado. Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera! Y el que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir, Entonces muchos de los judíos que habían venido para acompañar a María, y vieron lo que hizo Jesús, creyeron en él.”                  

23-24. a éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis  y matasteis  por manos de inicuos, crucificándoles. Al cual Dios levantó, sueltos los dolores de la muerte por cuanto era imposible que fuese retenido por ella.


La crucifixión de Jesús es un hecho narrado en los Evangelios, que relata la muerte de Cristo en el Gólgota de acuerdo con la fe cristina, Jesús a quien los Cristianos consideran el Hijo de Dios y el Mesías, según la tradición fue arrestado, juzgado por el Sanedrín de Jerusalén y sentenciado por el procurador Pilato a ser flagelado y, finalmente, crucificado. En conjunto estos acontecimientos son conocidos como la Pasión. El sufrimiento de Jesús y su muerte representan los aspectos centrales de la teología cristiana, incluyendo las doctrinas de la salvación y la expiación.

Gálata 6:14 “Pero lejos esté de mi gloriarme, si no en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo.”

Efesio 2:16 “Y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades.”

Mateo 10: 38 “Y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí.”

Mateo 16:24 “Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígueme.”

Mateo 20:19 “y le entregarán a los gentiles para que le escarnezcan, le azoten, y le crucifiquen; mas al tercer día  resucitará.”

Mateo 26:22-23 “Sabéis que dentro de dos días se celebrara la pascua, y el Hijo del Hombre será entregado para ser crucificado.”

Mateo 27:22 “Pilato les dijo: ¿Qué, pues, haré de Jesús, llamando el Cristo? Todos le dijeron: ¡Sea crucificado! Y el gobernador les dijo: Pues ¿qué mal ha hecho? Pero ellos gritaban aún más, diciendo: ¡Sea crucificado!

Mateo 27-31” Después de haberle escarnecido, le quitaron el manto, le pusieron sus vestidos, y le llevaron para crucificarle.”

Mateo 27:38 “Entonces crucificaron con él a dos ladrones, uno a la derecha, y otro a la izquierda.”

Lucas 23:33 “Y cuando llegaron al lugar llamado de la Calavera, le crucificaron allí, y a los malhechores, uno a la derecha y otros a la izquierda.”

Juan 19:17-18 “Y él, cargando su cruz, salió al lugar llamado de la Calavera, y en hebreo, Gólgota; y allí le crucificaron, y con él a otros dos, uno a cada lado, y Jesús en medio.”

Mateo 28:5 “Mas el ángel, respondiendo, dijo a las mujeres: No temáis vosotras; porque yo sé que buscáis  a Jesús, el que fue crucificado. No está aquí, pues ha resucitado, como dijo. Venid ved el lugar donde fue puesto el Señor.”

25-28 Porque David dice de él: Veía al Señor siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido. Por lo cual mi corazón se alegró  y se gozó mi lengua, Y aun mi carne descansará  en esperanza; Porque no dejarás mi alma en el Hades, Ni permitirás que tu Santo vea corrupción. Me hiciste conocer los caminos dela vida; Me llevaras de gozo con tu presencia.


Lo importante de este pasaje, es la enseñanza que nos deja como reflexión el Rey David, por su plena confianza, entrega, humillación ante Dios, lo reconoce como su Salvador,  Fuente de Ayuda, Perdonador y como el Dios Todo Poderoso, sabe que su fe esta puesta en él, que no debemos temer mal alguno porque Dios siempre estará con nosotros como lo estuvo con él. A pesar de su falta y errores que cometió en su diario vivir. Había paz y gozo en su corazón a pesar de la adversidad.

David, aunque amó profundamente al Señor, también era de carne y hueso como cualquier otro mortal. También era débil ante la tentación sexual y luego al crimen del hombre que traiciono, un momento de ociosidad en la vida del rey le llevó a grandes tiempos de pesar, de dolor de arrepentimiento y burla de sus enemigos y ante los ojos de aquel que lo había hallado conforme a su corazón, tómese en cuenta que David había tomado otras mujeres más.

David tiene motivos para estar deprimido, pero Jehová le levanta la cabeza, se renueve su valor, se fortalece su fe y se siente más seguro, ya que confía en Dios con toda su alma, está convencido de que lo protegerá de todo enemigo, tal como el escudo resguarda al soldado.

 Salmo 3: 1-2 “¡Oh Jehová, cuanto se ha multiplicado mis adversarios! Muchos son los que se levantan contra mí; No hay para él salvación en Dios.”

Salmo 3: 3-5 “Más tú, Jehová eres escudo alrededor de mí; Mi gloria, y el que levanta mi cabeza. Con mi voz clamé a Jehová, Y el que me respondió desde su monte santo. Yo me acosté y dormí, Y desperté, porque Jehová me sustentaba.”

Salmo 3: 6-8 “No temeré a diez millares de gente, que pusiere sitio contra mí. Levántate Jehová; sálvame, Dios mío; Porque tu heriste a todos mis enemigos en la mejilla; Los dientes de los perversos quebrantaste. La salvación es de Jehová; Sobre tu pueblo sea tu bendición.

Salmo 7: 1-2  “Jehová Dios mío, en ti he confiado; Sálvame de todos los que me persiguen, y líbrame, No sea que desgarren mi alma cual león, Y me destrocen sin que haya quien me libre.”

Salmo 7: 6 “Levántate oh  Jehová, en tu ira; Álzate en contra de la furia de mis angustiadores, y despierta en favor mío  el juicio que mandaste.

Salmo 27:1-4 “Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he te atemorizarme? Cuando se juntaron contra mí los malignos, mis angustiadores y mis enemigos para comer mis carnes, ellos tropezaron y cayeron. Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón; Aunque contra mí se levante guerra, Yo estaré confiado. Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscare; Que este yo en la casa de jehová todos los días de mi vida, para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo. “

 

29-32-Varones hermanos, se os puede decir libremente del patriarca David, que murió y fue sepultado, y su sepulcro está con nosotros hasta el día de hoy. Pero siendo profeta, y sabiendo que con juramento Dios le había jurado que de su descendencia, en cuanto a la carne, levantaría al Cristo para que se sentase en su trono, viéndolo antes, hablo de la resurrección de Cristo, que su alma no fue dejada en el Hades, ni su carne vio corrupción. A este Jesús resucito Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos.


DAVID EN EL LECHO DE MUERTE.

En este pasaje, El Apóstol Pedro prueba que la resurrección de Cristo esta predicha en el Antiguo Testamento, de ahí que su audiencia Judía debía estar lista para aceptar a Jesús como el Mecías. Él ha venido a redimir a todos, a traer plenitud del perdón divino, restauración que significa remplazar la muerte espiritual con la vida espiritual, no solo recibiremos un nuevo tipo de vida y una nueva calidad de vida, si no que debemos crecer en ella, con el fin de compartir este aspecto de su Misión: Ir por todo el mundo anunciando el perdón de Dios.  

Se declara aquí como un mandato y como una Misión: Así también como yo los envió, precisamente de la misma manera que el Padre Envió al Hijo para traer Salvación a todos los seres humanos que creen, Así somos enviados nosotrospara que a todos les llegue ese mensaje divino. Somos enviados como portadores de la sustancia del mensaje.

1Reyes 2:10 “Durmió David con sus padres, y fue sepultado en su ciudad.”

Nehemías 3:16 “Después de él restauró Nehemías hijo de Azbuc, gobernador de la mitad de la región de Bet-sur, hasta delante de los sepulcros de David, y hasta el estanque labrado, y hasta la casa de los valientes.”

Ezequiel 36: 25-28 “Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré un corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitare de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra. Habitaréis en la tierra que di a vuestros padres, y vosotros me seréis por pueblo, y yo seré a vosotros por Dios.”

Colosenses 1:27 “A quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria.”

Filipenses 1:6 “Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.”

Filipense 2:13 “Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad”

Romanos 8:13-14 “Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne; porque si vivís conforme a la carne, moriréis; más si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis. Porque todos los que son guiados por el Espíritu  de Dios, éstos son hijos de Dios.” 

33-36. Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís. Porque David no subió a los cielos; pero el mismo dice: Dijo el Señor a mi Señor: siéntate a mi diestra, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies. Sepa, pues, ciertísimamente toda la casa de Israel, que a este Jesús a quien vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo.


El Derramamiento del Espíritu es una Señal de que Jesús ha sido exaltado a la diestra del Padre y que Jesús es Señor. El Ministerio del Espíritu Santo esta predominantemente orientado a Cristo, una de sus partes está dedicada a instruir y recordar a los discípulos lo que Jesús enseño.

Cuando nacemos de nuevo y creemos que Jesucristo murió por nuestros pecados y lo recibimos como nuestro Salvador, hemos nacido de nuevo, Dios nos da un nuevo Espíritu para que more en nosotros y es ahí cuando el Espíritu Santo hace que la Palabra de Dios sea una realidad en nuestro corazón, y mediante la Palabra de Dios nos damos cuenta que somos salvos.

El nuevo creyente tiene que pasar por los siguientes pasos: Salvación, Nacimiento, Bautismo, Arrepentimiento, para obtener el crecimiento espiritual. El Espíritu Santo lo dota  con la vida y los dones del Espíritu, e inclusive la habilidad para orar con el poder del Espíritu. El Espíritu Santo es nuestro maestro, nuestra ayuda, nuestro abogado, nuestra guía y la fuente de la verdadera comprensión Espiritual. El da realce al Ministerio de Jesús y edifica a los creyentes, capacitándolos para vivir una vida cristiana saludable.

Juan 14:26 “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.”

Juan 15:26 “Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, el dará testimonio acerca de mí.”

Marcos 16:16 “El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.”

Juan 3: 1-7 “Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un principal entre los Judíos. Este vino a Jesús de noche y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él. Respondió Jesús  y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios. Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer? Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. Lo que es nacido de carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, Espíritu es. No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo.”

Nacimiento: Sin el nuevo nacimiento no hay vida, ni hay relación con Dios. Y con el Nuevo Nacimiento  surge una nueva perspectiva, vemos el reino de Dios, es más que simplemente ser salvo. El que ha nacido de nuevo tiene hambre y sed de las cosas de Dios. 1Pedro 2: 2-3 “Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis  para salvación. Si es que habéis gustado la benignidad del Señor” Ama a sus hermanos cristianos 1Pedro 1: 22-23 “habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amados unos a otros entrañablemente, de corazón puro; siendo renacidos, no de simiente corruptible, si no de incorruptible, por la palabra de Dios que vive y permanece para siempre.” No vive en pecado 1Juan 3.6 “Todo aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido” Tiene en si el testimonio del Espíritu Santo Romanos 8.14-16 “Porque todos los que no son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, si no que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos ¡Abba, Padre! El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.”

Salvación: En la Biblia viene de la Palabra Griega que significa “Rescatado o Librado del Peligro y de la Muerte” La Biblia enseña que todos los hombres son pecadores: Romanos 6:23 “Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.”  La Salvación está en una persona esa Persona es Jesucristo. “Jesús dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, si no por mí.”  Juan 14:6. La Salvación no está en la Iglesia, en un Rito, o en cualquier otra cosa. “Y en ningún otro hay Salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.” Hechos 4: 12. Se refiere al nombre de Jesús, solamente nuestra fe en Jesucristo, como nuestro Señor y Salvador Personal nos da la vida eterna.


37-38 Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de pecados; y recibiréis  el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare.


Para recibir el Bautismo debemos primero nacer de nuevo y permitirle al Espíritu que more en nuestras vidas y pertenecer a Jesús. Segundo pedirlo, Tercero rendirnos a él. El Apóstol Pablo lo explica claramente en el libro de los Romanos 12:1;Que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo” Cuarto disponernos a obedecer al Espíritu, si queremos ser sumergidos en él. Hechos 5.32 “Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen.” Quinto creerle. El apóstol pablo dice: “En esto solo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis  el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe? Gálatas 3:2. Debemos creer que si lo pedimos, lo recibiremos. Así debe ser la relación con Dios, Dios nos ofrece el Bautismo del Espíritu Santo a los seres humanos para que lo recibamos y gocemos de sus bendiciones.

Hechos 20:22-23 “Entonces Jesús respondiendo, dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo he de beber, y ser bautizados en el bautismo con que yo he de beber, y ser bautizado con el bautismo que yo soy bautizado? Y ellos le dijeron: Podemos. Él les dijo: A la verdad, de mi vaso beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados; pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, si no aquellos para quienes está preparado por mi Padre.”

Gálatas 3: 27 “Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.”

1Corintios 12:13 “Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean Judíos o griegos, sean esclavos o libres: y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.”

Hechos 22: 16 “Ahora, pues, ¿Por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre.”

Lucas 24:47-48 “Y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones, comenzando desde Jerusalén. Y vosotros sois testigos de estas cosas.

Efesio 2:13 “Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo”

Juan 3: 5” Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.”

Juan 3:16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.”

Juan 3:36 “ El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa  creer en el Hijo no verá la vida, si no que la ira de Dios está sobre él.”

40-47 Y con otras muchas palabras testificaba y le exhortaba, diciendo: Sed salvos de esta perversa generación. Así que, los que recibieron fueron bautizados; y añadieron aquel día como tres mil personas. Y perseveraban en la doctrina de los Apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles. Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno. Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabado a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía a la iglesia los que habían de ser salvos.


Los judíos tenían una costumbre de hospitalidad durante cualquier día festivo mayor como Pentecostés, los visitantes eran recibidos en casa privadas, y nadie podía cobrar por dar una cama o un cuarto a un visitante, o por proveer para su necesidad básica. La Iglesia es para adorar a Dios y aprender de su Palabra juntos, Dios quiere que compartamos nuestras vidas los unos con los otros, y seguir el ejemplo de Hechos 2:40-47, Dios se encargará de hacer la Iglesia crecer Él mismo.

En estos versículos de las Sagradas Escrituras  nos enseña que como hermanos en cristo debemos: Compartir que quiere decir Unidad, Estrecha Asociación, Participación, una Sociedad, Comunión, Compañerismo, Ayuda de Contribución y Hermandad. 

En la Unidad es producida por el Espíritu Santo, el individuo mantiene Intimas Relaciones de Compañerismo con el resto de la sociedad Cristiana, la Unidad une firmemente a los Creyentes al Señor Jesús y a los Unos con los Otros.

Para Crecer una Iglesia llena de Vitalidad se requiere los siguientes pasos:

LÍDERES, Incorporad vuestra Congregación Evangelizando y será el resultado de una iglesia que vive en obediencia a la voluntad de Jesús.

LIDERES, Elevad a menudo esta oración con fervor en el servicio de adoración de vuestra Congregación.

LIDERES, Compartid vuestros ministerios, No debilitéis vuestra vida y ministerio haciendo cosas que otros deben hacer.

LIDERES, Someteos a la dirección del Espíritu cuando tengáis que tomar decisiones. Llamad a otros Líderes para orar y ayunar en tales ocasiones. Ceded sin vacilaciones vuestro ministerio a otra persona, Si el Espíritu lo pide.

LIDERES, No aceptéis alabanzas impropias de la gente. Rechazad la injusta adulación de admiradores.

LIDERES, Preparad personalmente gente joven llamada al ministerio.

LIDERES, Guardaos contra la deslealtad. Recordad que nadie hace discípulos por sí mismo. Aceptad la responsabilidad de guardar el rebaño de Dios de los Lobos Salvajes.

LIDERES, Aseguraos de enseñar todo el consejo de Dios. Vivid en obediencia al evangelio, y observad los resultados de la evangelización y el crecimiento espiritual.

CREED FIRMEMENTE, Que Dios cumplirá todo lo que Él ha prometido en su Palabra.

Romanos  14:18 “Porque  el que en esto sirve a Cristo agrada a Dios, y es aprobado por los hombres.”

1Corintios 10:16 “La copa de bendición  que bendecimos, ¿no es la comunión de la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la comunión del cuerpo de Cristo?”

Se refiere  a la importancia del pacto de comunión, y de la sangre, Esta celebración de la Pascua iba a ser la última cena que Cristo compartiría con los Discípulos antes de su muerte. Fue también el marco que el Señor escogió para transformar el significado de la Copa y del Pan dentro del concepto del nuevo Pacto. Ahora, el recibir la copa es participar en la Sangre de Cristo, y el partimiento del Pan es participar en su cuerpo.

Lucas 22:19-20 “Y tomó el pan y dio gracias, y lo partió y les dio diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado; haced esto en memoria de mí. De igual manera, después que hubo cenado, tomó la copa, diciendo: Esta copa esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.”

Dios quiere que tu yo perseveremos, este es el mejor camino para lograrlo, pero es necesario que cada día:

- Crezcamos en su Palabra

- Fortalecer nuestra relación con nuestros hermanos en Cristo y nos tomemos de la mano de Dios a través de la Oración

- Nos recuerda, que no nos detengamos y que perseveremos.

 

3. 1-10 Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración. Y era traído un hombre cojo de nacimiento, a quien ponían cada día a la puerta del templo que se llama la Hermosa, para que pidiese limosna de los que estaban en el templo. Este, cuando vio a Pedro y a Juan que iban a entrar en el templo, le rogaba que le diesen limosna. Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos. Entonces él les estuvo atento, esperando recibir de ellos algo. Mas Pedro le dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. Y tomándole por la mano derecha le levanto, y al momento se le afirmaron los pies y tobillos; y saltando se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando y alabando a Dios. Y todo el pueblo le vio andar y alabar a Dios. Y le reconocían que era el que se sentaba a pedir limosna a la puerta del templo, la Hermosa; y se llenaron de asombro y espanto por lo que le había sucedido.


En este primer milagro que Hechos registra y que fue realizado por los Discípulos, se nos da la clave para el ejercicio por parte de todos los creyentes de la autoridad de la Fe. Al ordenar la sanidad en el hombre cojo de nacimiento, Pedro emplea el nombre completo de Nuestro Señor Jesucristo.  De igual manera este acto nos deja la enseñanza que nosotros como cristianos debemos tomar autoridad sobre la Enfermedad o sobre los Demonios. En nuestra confesión de Fe o proclamación  de poder, confesemos su deidad y su señorío como el Cristo, Usemos su nombre precioso como Jesús (Salvador). Clamemos a Él como Señor Jesús o Jesucristo, o Jesús de Nazaret, sin que en este punto haya la intención de establecer un principio legal o ritual. Pero es sabio recordar que al igual que oramos “En el Nombre de Jesús” También ejercemos toda autoridad en Él, mediante el privilegio de poder que nos ha dado en su nombre.

La Hora Novena era aproximadamente las 3:00 pm

Juan 16:23-24 “En aquel día no me preguntéis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo dará. Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.”

Hechos 14: 8 “Y cierto hombre de Listra estaba sentado, imposibilitado de los pies, cojo de nacimiento, que jamás había andado.”

Hechos 4:10 “ Sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis  y a quien Dios resucito de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano.”

Filipenses 2:10-11 “Para que en el Nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están el cielo, y en la tierra y debajo de la tierra. Y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.”

Mateo 28:19 “Por tanto id, y haced discípulos  a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y en el Hijo, y del Espíritu Santo.”

Juan 16:23 “En aquel día no me preguntéis  nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis  al Padre en mi nombre, os lo dará.”

Juan 14.13-14 “Y todo lo que pidiereis  al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo hare.”


Orar es hablar con Dios y decirle lo que sientes, Él conoce lo que hay en tú corazón y por lo que estás pasando, antes de tú abrir tu boca Él ya sabe todo, pero es importante confesarlo delante de Él.

  

ORACION DE SALVACION

  

“Amado Dios, acepto a Cristo, ahora mismo como único y exclusivo Salvador de mi alma. Te acepto Jesús, públicamente; no me avergüenzo de ti; perdona mis pecados. Entra a mi corazón. Cambia mi vida. Lávame en tu sangre, y ayúdame a que persevere, firme en tu camino, firme en la Iglesia. Que sea bautizado y que sea lleno del Espíritu Santo. Escribe mi nombre en el Libro de la Vida. Te amo, Jesús. Gracias Jesús, creo en ti y soy salvo ahora. Tu sangre limpió mis pecados. Amen.

 

 

Mi correo es: elisacardona59@Hotmail.com

 

 

 

 


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